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"El reclamo"
La coproducción italiana-argentina dirigida por Stefano Pasetto se rodó aquí con un elenco que incluye a los locales Julieta Cardinali, Guillermo Pfenning, Arturo Goetz y Lola Berthet, entre otros.
Sábado al mediodía. Un team de sonidistas, técnicos, maquilladoras, asistentes, invaden el coqueto loft de los famosos silos de Dorrego, en el límite exacto que divide Palermo de Colegiales. El equipo de filmación de El reclamo, coproducción ítalo-argentina dirigida por el italiano Stefano Pasetto, está en pie desde las 8.30.Protagonizada por dos conocidas actrices italianas, Sandra Cecarelli y Francesca Inaudi, la película cuenta con un elenco argentino que incluye a Julieta Cardinali, Guillermo Pfening, Lola Berthet, César Bordón, Arturo Goetz e Hilda Bernard."Es una historia de amor que empieza en Buenos Aires —cuenta en un impasse el director, en perfecto español— entre dos mujeres italianas, Lucía (Cecarrelli) que es azafata, tiene 40 años y está casada, y Lea (Inaudi), de 30, que trabaja en una pollería. Se encuentran de casualidad y esta amistad las va a cambiar. En un momento deciden viajar a la Patagonia".Pasetto (cuya primera película fue Tortugas al revés, de 2005) nunca había estado en la Argentina. "A la Patagonia la conocía como un lugar mítico de literatura, pero verla personalmente es diferente", asegura el cineasta que eligió como director de fotografía al argentino Bill Nieto. Tampoco hablaba español. "Aprendí durante el trabajo —explica—. Hablando con los colaboradores. Todos estuvieron muy bien dispuestos y me ayudaron mucho".La escena que se filma hoy transcurre en el baño de la casa de Lucía, donde ella comienza a fantasear con su nueva amiga Lea. Antes de rodar se toman las medidas necesarias para lograr la mayor privacidad posible: pocos técnicos en el set, batas bien a mano. Un asistente chequea permanentemente que el agua se mantenga cálida.Las fantasías de Lucía quedan interrumpidas por la llegada de su marido, Bruno, interpretado por el argentino César Bordón. Después de tres repeticiones, el director queda satisfecho con el resultado. Corten. Queda.A las dos de la tarde el equipo para a almorzar: ñoquis caseros, asado y panqueques con dulce de leche. Hay un clima especial, ya que es el último día de rodaje en Buenos Aires. En unos días, el director deberá volver a Península de Valdez —donde ya filmaron durante dos semanas— por unas últimas tomas
Sábado al mediodía. Un team de sonidistas, técnicos, maquilladoras, asistentes, invaden el coqueto loft de los famosos silos de Dorrego, en el límite exacto que divide Palermo de Colegiales. El equipo de filmación de El reclamo, coproducción ítalo-argentina dirigida por el italiano Stefano Pasetto, está en pie desde las 8.30.Protagonizada por dos conocidas actrices italianas, Sandra Cecarelli y Francesca Inaudi, la película cuenta con un elenco argentino que incluye a Julieta Cardinali, Guillermo Pfening, Lola Berthet, César Bordón, Arturo Goetz e Hilda Bernard."Es una historia de amor que empieza en Buenos Aires —cuenta en un impasse el director, en perfecto español— entre dos mujeres italianas, Lucía (Cecarrelli) que es azafata, tiene 40 años y está casada, y Lea (Inaudi), de 30, que trabaja en una pollería. Se encuentran de casualidad y esta amistad las va a cambiar. En un momento deciden viajar a la Patagonia".Pasetto (cuya primera película fue Tortugas al revés, de 2005) nunca había estado en la Argentina. "A la Patagonia la conocía como un lugar mítico de literatura, pero verla personalmente es diferente", asegura el cineasta que eligió como director de fotografía al argentino Bill Nieto. Tampoco hablaba español. "Aprendí durante el trabajo —explica—. Hablando con los colaboradores. Todos estuvieron muy bien dispuestos y me ayudaron mucho".La escena que se filma hoy transcurre en el baño de la casa de Lucía, donde ella comienza a fantasear con su nueva amiga Lea. Antes de rodar se toman las medidas necesarias para lograr la mayor privacidad posible: pocos técnicos en el set, batas bien a mano. Un asistente chequea permanentemente que el agua se mantenga cálida.Las fantasías de Lucía quedan interrumpidas por la llegada de su marido, Bruno, interpretado por el argentino César Bordón. Después de tres repeticiones, el director queda satisfecho con el resultado. Corten. Queda.A las dos de la tarde el equipo para a almorzar: ñoquis caseros, asado y panqueques con dulce de leche. Hay un clima especial, ya que es el último día de rodaje en Buenos Aires. En unos días, el director deberá volver a Península de Valdez —donde ya filmaron durante dos semanas— por unas últimas tomas
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